El concello de Ourense y unos trece titulares de puestos de comidas y pulpeiras llegan a su primer pacto sobre la fecha de la próxima feria, que será el día 8.
E. O. / Ourense
Concello de Ourense y unos trece titulares de puestos de comidas y pulpeiras llegan a su primer pacto sobre la fecha de la próxima feria, que será el día 8. Después de la huelga organizada por las vendedoras, que se plantaron un día que no les correspondía en el recinto ferial, a modo de protesta y acabaron siendo desalojadas por la policía, ayer se alcanzó un acuerdo con el concejal de Comercio, Aurelio Gómez, tras una reunión que ellas mismas habían fijado con el ayuntamiento.
El próximo domingo que recae en día 7 -fecha de feria- y cuya celebración, según la ordenanza municipal, debería trasladarse al día anterior, se cambia para el lunes 8, tras la petición unánime de las pulpeiras. El concejal tiene en cuenta la excepcionalidad de este caso, por coincidir con la festividad de Reyes, para conceder el cambio: "Hasta el 17 de junio no vuelve a haber una feria que cae a domingo, por lo que tenemos tiempo para estudiar una posible modificación de algunos aspectos de la ordenanza", afirma.
Aún así, Gómez apunta que habría que reunirse con todos los sectores afectados por la feria y el mercado, en el próximo mes de enero, y debatir un cambio de la norma municipal sobre venta ambulante. "La feria no sólo les afecta a ellos, porque hay otros perjudicados que participan activamente en la feria, como los comerciantes de la Praza de Abastos o los vendedores ambulantes", explica Aurelio Gómez.
Las pulpeiras -en su mayoría de la localidad carballiñesa de Arcos- mostraron su satisfacción con el cambio de esta fecha, según Concepción González porque de trasladarse al día 5 sostiene que "non iría ninguén".
Faro de Vigo - Ourense - 23/12/2006
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